Puntos pequeños y palpables dentro de los músculos, a menudo en zonas tensas o estrés.
Causa dolor agudo que puede irradiarse a otras partes del cuerpo, como el dolor de espalda que puede llegar al brazo.
Activo: Provoca dolor constante, afectando a las actividades diarias. Latente: Provoca dolor cuando se toca, pero no de forma constante.
Estrés muscular crónico, trauma o tensión emocional pueden desencadenarlos.
Dolor persistente, rigidez, pérdida de fuerza y sensación de hormigueo en el área afectada.
Muchos pacientes experimentan una mejora inmediata después de la sesión.
Es una alternativa a los medicamentos analgésicos, especialmente útil para pacientes que desean evitar el uso de medicamentos.
Como parte de un tratamiento integral, puede aliviar los síntomas de forma persistente a largo plazo.
En nuestra consulta ofrecemos una atención personalizada y tratamientos de calidad adaptados a tus necesidades. A continuación encontrarás los horarios y tarifas para poder organizar tu visita con nosotros: